Todos
sabemos la situación que viven muchas mujeres en el mundo sufriendo acoso,
maltrato y humillación. También nos es conocido, como bastantes de estos dramas
personales terminan con la muerte de una mujer.
Consideramos
que la labor de los centros docentes es insuficiente para poder crear un modelo
de relación entre hombres y mujeres basado en el respeto y la igualdad de
derechos y por eso proponemos una serie de orientaciones a las familias:
q Establece
las mismas obligaciones y derechos para hijas e hijos. No las sobrecargues a ellas.
q Comparte
de forma justa y equilibrada las tareas domésticas entre todos los miembros de
la familia.
q Permite
que hijos e hijas tengan las aficiones que deseen sin catalogarlas de aficiones
de
“chicas”
o aficiones de “chicos”.
q Enseña
a tus hijas a no soportar agresiones, humillaciones, silencios, omisiones...
q Enseña
a tus hijas e hijos a ser respetuosos y a no usar la violencia en sus
relaciones personales. Los chistes que
infravaloran a las mujeres, las burlas, las agresiones verbales… son diferentes
formas de violencia.
q Usa
el femenino en el lenguaje para hacer visible a las mujeres y a tus hijas. No
es lo mismo
Decir.
Mis hijos están en el parque que Mi hija y mi hijo están en el parque. Tu hija
existe, por lo tanto nómbrala.
q Habla
con cariño y respeto de las tareas desempeñadas por las mujeres de la familia:
abuelas, tías, madre, hermanas...Han entregado gran parte de su tiempo y su
energía al cuidado de otras personas y es importante valorar dicha tarea.
q Cuenta
anécdotas de cosas importantes que han realizado mujeres cercanas dando
dignidad e importancia a las tareas que han realizado.
q Respeta
las elecciones profesionales que realicen tus hijas e hijos; no hay profesiones
para hombres ni profesiones para mujeres.
q Evita
frases como “Eso es muy feo para una niña”, “¿No te da vergüenza portarte así
siendo un niño?” “No me esperaba esto de una mujer” “Parece mentira, siendo un
hombre, que permita esto” “Los niños no lloran”. Tus hijos e hijas no tienen
que ser de una determinada manera por haber nacido niña o niño
Debemos favorecer desde nuestra familia, que nuestros hijos e hijas
crezcan felices y sean todo aquello que deseen e imaginen educando siempre en
la IGUALDAD.La coordinadora de coeducación: Yolanda Ceballos-Zúñiga Reyes
Mañana en clase trabajaremos este aspecto con los niños/as.
Un saludo. Yolanda